¡Trabajo, trabajo, trabajo! Es una de las exclamaciones que más se escucha en las sociedades contemporáneas. La necesidad de establecer medidas que perfeccionen el mercado laboral no sólo pertenece a países en vías de desarrollo, sino que engloba, en algunos casos, a naciones estables dentro del primer mundo.
Es el ejemplo de Francia y las regulaciones para combatir el desempleo propuestas por el primer ministro Édouard Philippe, en las que se incluye una penalización a las empresas que abusen de los contratos temporales.
En nuestra sección “Noticias por el mundo” de Nación Virgin te entregamos los detalles más importantes acerca de esta iniciativa.
Un poco de contexto
Aunque la economía francesa ha empezado a recuperarse, todavía registra grandes niveles de cesantía. En 2018 la cifra de desocupados llegó a 3,5 millones de personas, encontrándose lejos del pleno empleo del que hablan los economistas.
¿Cuáles son sus causas? Una de ellas podría ser el aumento de las relaciones laborales breves, representadas por contratos temporales que tienden a quitarle calidad al trabajo. De hecho, el 87% de los contratos pactados en el país galo tiene una duración definida y el 70% no pasa más allá del mes. No hay que ser expertos para saber que esta situación frustra cualquier intento de proyectarse en una organización.
Sin embargo, no hay por qué ser tan drásticos. Algunas empresas pueden -según su tipo de servicio- necesitar de trabajos temporales. El problema es cuando se abusa, debido a que un contrato fijo puede ser un mal negocio para la compañía, ya que los finiquitos son más caros, producto de la indemnización.
Esto hace que algunos renueven contratos temporales repetidas veces, y roten constantemente al personal para evitar tener demasiados empleados fijos. Así, ahorran dinero en despidos y otros gastos sociales, generando un escenario de inestabilidad.
Cortemos el escándalo
Lo anterior puede que se acabe en lo pronto. Las medidas propuestas tienen el propósito de garantizar que los contratos temporales se utilicen de una manera correcta.
¿Cómo? Las empresas que roten de forma excesiva al personal pagarán cotizaciones más altas (5%); y las que no, cotizaciones más bajas (3%). De esta forma, las organizaciones que pretendan ahorrarse esta multa deberán enfocarse a tener planillas de trabajadores más estables.
Un dato importante: esta medida se aplicará a las empresas que cuenten con al menos 11 empleados y que pertenezcan a rubros específicos, como tabaco y bebidas, suministro de agua y gestión de residuos, transporte y almacenamiento, industria maderera, papel e imprenta, entre otros.
Este sistema es conocido como “bonus-malus”, es decir, premiar y castigar, que se aplica generalmente en los seguros de autos cuando se rebaja o incrementa el valor de la prima dependiendo del número de accidentes que hayan ocurrido.
No todos están contentos
En las noticias del mundo que tratan acerca de decisiones políticas, es difícil que todas las partes estén alegres. Los dueños de las empresas no tienen una buena impresión acerca de esta medida. Para ellos, elevar las cotizaciones, es cargar un poco más la mano a un país que consideran que tiene una elevada presión tributaria que frena el crecimiento económico.
Razón o no, es de esperar que esta medida fortalezca las relaciones que tienen los trabajadores con su trabajo, en un contexto internacional donde faltan noticias del mundo que estén ligadas a mejoras importantes en la calidad de vida de los ciudadanos.